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06 de febrero de 2010
Oscar Azócar quiere recibir más homenajes en vida.
El ex toletero de 45 años de edad fue exaltado ayer al Pabellón del Caribe en un acto donde visiblemente conmovido, el ex toletero recibió la condecoración de manos del presidente de la LVBP, José Grasso Vecchio. También fue exaltado el otrora lanzador Wilson Álvarez, quien no asistió al evento.
Oscar Azócar se paró de la silla con la misma impaciencia que mostró como bateador, durante sus días como pelotero activo.
El moderador y director de la Serie del Caribe, Rubén Mijares, no había terminado de mencionar su nombre, cuando el nuevo miembro del Salón de la Fama de las Series del Caribe ya estaba de pie, abriéndose paso entre los flashes para recibir la placa que inmortalizó ayer su nombre.
Visiblemente conmovido, el ex toletero recibió la condecoración de manos del presidente de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional, José Grasso Vecchio. "Es un honor para mí recibir este homenaje. Y estoy dispuesto a recibir muchos más; pero dénmelos en vida, para poder disfrutarlos", dijo antes de retirarse a su asiento, para mostrarle la placa a su esposa Liliana y a sus hijos.
Azócar, quien actuó entre 1983 y 2002 en la pelota profesional venezolana, fue inmortalizado, junto con Wilson Álvarez, por los números que cosechó en los clásicos caribeños, durante su carrera como jugador.
De acuerdo con los registros de Alfonso Araujo Bojorquez y José Antero Núñez, el otrora jardinero de los Leones del Caracas, Navegantes del Magallanes, Caribes de Oriente, Tigres de Aragua y Tiburones de La Guaira, participó en tres Series del Caribe, (1988, 1990 y 1994), aunque él aseguró haber estado en cuatro campeonatos regionales.
"ESTA PLACA TIENE DOS ERRORES", advirtió. "Porque yo no asistí como refuerzo a la Serie del Caribe de 1994. En esa temporada yo jugué con los Navegantes, así que fui porque era mi equipo".
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